No me gusta mi cuerpo...

No me gusta mi cuerpo. Cuantas veces hemos escuchado o dicho esta frase, en mi caso, muchas veces, y lo hacemos de distintas formas, diciéndonos gord@s, fe@s, comparándonos con otr@s, etc..

Estaba conversando con alguien sobre la intención de empezar a comer saludable, cambiar el habito de alimentación por uno mejor y el gran deseo que provocaba hacer la "despedida" comer todo tipo de comida chatarra que se antoje, antes de que llegue el lunes, ya que como todos sabemos 'las dietas" se comienzan los lunes, hahahaha. 

Fue una conversación bastante rápida, pero al día siguiente me motivo a recordar algo maravilloso que pude aprender haciendo un Detox de alimentación y energía con Cristina Olivero, su IG es @yosoyaltavibra por si gustas indagar, a lo que voy, es que durante un mes nos desintoxicamos el cuerpo y la mente y lo mas significativo que me lleve de esa experiencia es que ninguna dieta me va a   dar resultado si la base de mi motivación es no amar mi cuerpo, es decir, cada vez que decido por productos alimenticios que me hacen mucho daño, no estoy amando mi cuerpo, al contrario lo estoy maltratando, y pienso que peor que antes ya que ahora tengo la conciencia de esto y las consecuencias. Sin embargo cuando prefiero consumir alimentos que me gustan y se que son beneficiosos para mi, estoy amándome, estoy cuidándome.

No dejo de consumir cosas tóxicas porque odio mi cuerpo y debo rebajar, CONSUMO ALIMENTOS BUENOS PORQUE AMO MI CUERPO Y LO CUIDO.

Esa enseñanza me acompaña y me ha permitido ser mas consciente, bajarle al stress de la comida y las libras e intentar no maltratarme con la frecuencia en que antes lo hacia, mira tu despensa y observa lo que le estas brindando a tu cuerpo a través de la comida, si es tu amor o tu poco amor.

Esto también me gustaría trasladarlo al diario vivir, que situaciones, relaciones, malos tratos permitimos y mantenemos cerquita cuando sabemos que no son beneficiosos para nosotros o quizás no tenemos la conciencia plena de que tanto daño nos hacen (enfermedades como resultado de la mala gestión de emociones),  en ese escenario también manifestamos nuestro nivel de amor propio, de respeto, de cuidado. Aquí quizás no hay una despensa que mirar, pero si una evaluación personal, que exige determinación, humildad y sinceridad, para ver a tu alrededor e identificar que es sano para ti y que no. Quizás no lo midas con libritas de mas, pero si pudieras hacerlo con el nivel de paz y felicidad que experimentas.

Cuando decidamos comer entre cosas sanas y no tan sanas, recordemos esto, amo mi cuerpo prefiero cuidarlo, darle lo mejor. 

Cuando nos exponemos a situaciones de stress, de incomodidad, recordemos y cuestionemos esto, que es prioridad para mi, estar en paz o esta situación que me disgusta, y fijemos la atención en mantener una buena y mejor relación primero contigo, por AMOR, para poder manifestarla con los demás, por la misma razón, EL AMOR.

J


Comentarios